La llanura infinita, solo interrumpida por el perfil de las sierras azules dibujadas en el horizonte, fue la primera visión de mi bisabuelo Huberto María Rössler cuando sobre el filo de 1890 llegó a Coronel Suárez para recrear su propio mundo al sur del continente americano. El ferrocarril que desafiaba estas inmensidades lo dejó en el andén de un incipiente caserío que comenzaba a crecer en las cercanías del Sauce Corto, a unas leguas del monumental corral de piedra que los pueblos originarios denominaron “Curu- Malal”.

​Era el marco natural ideal para comenzar una nueva vida en un territorio de sierras y planicies que remitía a Bergheim, su aldea natal en Alemania. Rössbauen es justamente un juego de palabras en homenaje a la búsqueda de los sueños de mi familia que construyó (Bauen, en alemán, significa construir) aquí su lugar pensando en su futuro y el de sus descendientes.

​El proyecto de construcción en altura mantiene como idea central el mismo criterio que influyó sobre el ánimo de nuestros ancestros para afincarse aquí definitivamente. Imaginemos la visión de una planicie coloreada por los sembrados en el aire limpio de la pampa, que se mimetiza a lo lejos con un horizonte policromático de cielo y sierras.

​Pero si la inspiración para el Edificio Rössbauen fueron los días del pasado todo lo que se refiere a su proyección, ejecución y habitabilidad está relacionado de manera exclusiva con el futuro. Está pensado para ser el mejor lugar de Coronel Suárez en una eficaz combinación de la calidad de vida urbana con las facetas más atractivas de la vida de campo.

​Un diseño de avanzada, sumado a la experiencia y respaldo profesional para un desarrollo con los mejores materiales del mercado, convierten a Rössbauen en una sólida inversión para quienes deseen vivir con los más altos niveles de confort.

​En definitiva, un hábitat único pensado y desarrollado por gente de Coronel Suárez en una ciudad en crecimiento. Y para seguir disfrutando el privilegio de un paisaje que cautivó a nuestros antepasados hasta convertirlo en su lugar en el mundo, para siempre.